martes, 12 de agosto de 2008

Eludir lo ingrato

Dice un buen amigo que hay que intentar eludir lo ingrato. Quizá el tema de la muerte que proponía como motivo de reflexión sea una de los aspectos más ingratos. Disculpadme por la iniciativa. Trataré de sugerir argumentos menos trágicos.

la Parca

Hola, queridos amigos. Soy Carlos Pérez Cavero. Hoy, 12 de agosto del 2008, comienzo el blog. Es la primera vez que me adentro en esta forma de comunicación. Soy periodista y guía turístico. Vivo en Zaragoza. Estoy en ese periodo de la vida que llaman la edad madura (52 años). El próximo 26 de septiembre -espero- serán 53. Digo que espero porque, ultimamente, ando pensando que la Parca puede presentarse en cualquier momento. En los últimos días, he tenido noticias de que amigos, rondando mis años hacia arriba o hacia abajo, han dejado este mundo miserable; miserable pero, el único que conocemos. Decía Miguel Hernández : "Llegó con tres heridas, la de la vida, la del amor , la de la muerte..." No sé si pensar en la muerte es acercarse a ella. He leido en algún lugar que la llamada "crisis de los cuarenta" ha sido eclipsada por la "crisis de los cincuenta". Obviamente, me he sentido identificado. Dicen los psicólogos que resulta terapeútico poner negro sobre blanco lo que nos atormenta. También lo apuntan las gentes dedicadas a la literatura. Quizá sea por eso por lo que, en esta calurosa tarde de agosto, me he animado a comenzar este blog. Le he dado el nombre genérico de "Apuntes", recordando que, hace muchos años, en 1983, mantuve ese título, durante algunos meses, en el diario "El Adelanto" de Salamanca, donde ejercí como periodista. Después, dí un cambio de timón y me dediqué a la actividad turística, desempeñando las tareas de guía-correo en diveros paises. Y, ahora, estoy en un periodo raro de mi existencia. Profesionalmente, es un tiempo sabático. Tiempo de reflexión, de búsqueda, de introspección. Supongo que, en un blog, uno no puede desnudar completamente su intimidad. Hay un pudor razonable respecto a lo que uno quiere contar. Espero que si alguien lee estas líneas , se anime a proporcionarme sus intuiciones y devaneos existenciales.